
La camisa fue, es y será la prenda fetiche de la firma mexicana
fotografía Rodrigo Álvarez
Principios del siglo XIX. Un elegante burgués recorre Savile Row, la calle insignia de la sastrería y camisería del distrito Mayfair de Londres —y del mundo—. Orgulloso porta una camisa, como esas que los caballeros gustaban vestir: impoluta, sin una sola arruga… perfecta.
A lo largo de la historia, la camisa, una prenda obligatoria en el clóset de todo hombre, ha mantenido su formal y tradicional construcción: dos mangas, botones al frente y un fit sobrio y relativamente sencillo.
Pero como en muchas historias, llega el punto de inflexión. El momento en el que los estándares se siguen solo para romperse, para destruirse y recrearse. Para darle paso a lo desconocido y diferente.


Así es la camisa de Boyfriend’s Shirt. Una que no sabes cómo ponerte, que a primera vista reta tus preconcepciones de cómo debe usarse. Una vez que descifras el misterio descubres que así como ese caballero británico, tú también puedes sentirte orgulloso de tu estilo y masculinidad con una pieza que rompe con todo lo que conocías.
Y así fue como se imaginó Laura Carrillo esa primera camisa que diseñó para el proyecto de indumentaria que fundó junto a Cristina Laurenco (empresaria) y Manuel Forte (artista plástico). “La camisa es el hilo conductor de nuestra historia. Es la prenda obligatoria del clóset de todo hombre, pero yo quería que ésta rompiera con todas las reglas”, asegura Laura.
Para su quinta colección (Otoño – Invierno 2019/2020), Boyfriend’s Shirt le hace honor a esa prenda fetiche que la distingue como una firma que sigue sus instintos, que juega con las proporciones, que se arriesga y que obliga al hombre a encontrar una nueva versión de sí mismo.


Los contrastantes escenarios de la Casa Anahuacalli de Diego Rivera y el estilo del artista fueron los detonantes de Idolaje, la colección que se presenta mañana en Frontón México.
“Es un guiño a los colores terracotas y los salones que parecieran estar en la penumbra en Casa Anahuacalli y a los detalles que Diego Rivera sabía llevar tan bien: camisas de cuellos peculiares, sacos con amplios bolsillos y pantalones achísimos”.
Y así como deconstruye la camisa, Boyfriend’s Shirt también recrea el resto de las prendas básicas de un guardarropa masculino: el saco, la chamarra y el pantalón.
“Quiero que los hombres se vean cool, que no pierdan su esencia, pero que sí tengan la posibilidad de ser y verse diferentes”.


Descubre la colección de Boyfriend’s Shirt mañana durante nuestra cobertura en Instagram @192_revista.
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