Entre los planos de la realidad y lo onírico: Rafael Coronel

0909
texto Daniela Navarrete
fotografía de retrato Cuartoscuro
fotografías de exposición Palacio Municipal de San Miguel de Allende

Para Rafael Coronel, pintar era como respirar. ¨Recuerdo que él me decía: Trato de irme a dormir, pero mis manos quieren pintar”, narra Lourdes Sosa, amiga del artista, y curadora de la exposición: ¨La Danza¨, presente en el palacio municipal de San Miguel de Allende, Guanajuato. Pero Rafael no tenía que dormir para visualizar tan claramente esas escenas tan cargadas de misticismo, casi que las visiones llegaban por sí solas a su mente. Su atracción por los seres marginales y siniestros se mostraba inevitable. 

 

Los personajes que rondaban su psique frailes, monjes, muertos y demonios parecen suspendidos entre los planos, ya sea en sus esculturas que parecen flotar, o en sus pinturas, donde la fantasía y la realidad son dos extremos que se niega a tocar por completo. Son intencionalmente hipnotizantes. En algunas piezas, incluso el marco fue diseñado personalmente por Rafael con el propósito de que los ojos del espectador fueran tragados por la obra. Pero a pesar de ser oscuras, todas muestran cierta humanidad que las aferra a lo terrenal. 

 

Rafael Coronel San Miguel de Allende

 

Las esculturas de elefantes con largos sombreros puntiagudos, por primera vez mostradas al público en esta exposición conmemorativa del nombramiento de San Miguel como capital americana de la cultura, muestran cómo el cuerpo y el movimiento eran de gran importancia para Coronel, pues las posiciones de los animales en estas piezas aparecen aún más fantasiosas que los sombreros mismos. Así de alucinante es el detalle de la obra.  

 

El pintor originario de Zacatecas tenía un gusto peculiar por las cosas ocultas y las máscaras. En su mente, nadie está exento de usarlas. Es este tipo de aficiones que se repiten en diferentes formatos y contextos que hacen de su estilo algo reconocible y explorado a fondo. 

 

La exposición de los sombreros puntiagudos y brillante color azul, estará presente en las habitaciones del palacio municipal de San Miguel de Allende hasta el 10 de diciembre.


Ediciones anteriores

192

Embalsamada con picante: Nicole Chaput

Nicole Chaput (1995) es una pintora mexicana que estudió la Licenciatura en Bellas Artes en la School […]

2203
192

“Somos lo que hay” de Carlos Álvarez-Montero en galería OJO | Versalles

somos lo que hay carlos alvarez-montero Revisitar un archivo fotográfico de más de 20 años de trabajo, […]

2001
192

Tapetes Mughal y su encuentro con Rocca Luis César

Cuando dos proyectos virtuosos en su propio quehacer hacen sinergia —me refiero a los tapetes Mughal y […]

0901
192

Mujeres Laguna

En la colonia Doctores, entre máquinas de hilo abandonadas y herrería color verde pistache, se ha ido […]

1204
192

El Circuito de Arte #EnBahidorá 2024

Bahidorá es energía creativa en movimiento. Una suma de voces que se involucran no sólo con la […]

1512
192

Marta Moreno, la artista que explora el mundo de lo diminuto

Marta Moreno nació el 9 de mayo de 1982 en Úbeda, Andalucía, al sur de España, pero […]

0112
192

Los Dos Uno

Tulum es una tierra de misterios, una ciudad conocida por sus ruinas y sus innumerables cenotes, emblemática […]

3011
192

“Cierre” con (mucha) “Onda”

El fin de este año se acerca y con ello, la tercera edición de CIERRE, mucho más […]

2711
192

“También es jardín” por Salmiana: un tributo a las plantas que habitan la ciudad del caos

Entre espejos y luz solar, el estudio de áreas verdes Salmiana presenta También es Jardín en un […]

2311