Amat Escalante es un visionario conocido por retratar historias de violencia y crudeza —que forman un manto que cubre a México— en el cine, es conocido también por ganar el Premio a Mejor Director en Cannes en 2013 y dirigir obras cinematográficas como Heli (2013), Los Bastardos (2008) y Sangre (2005). 

Su más reciente película Perdidos en la noche —estrenada en mayo de 2023 en la edición 76 del festival de Cannes— llegó a los cines de México el 14 de diciembre con las actuaciones de Bárbara Mori (Carmen Aldama), Juan Daniel García Treviño (Emiliano), Ester Expósito (Mónica Aldama), Fernando Bonilla (Rigoberto Duplas), Jero Median (Rubén) y María Fernanda Osio (Jazmín), entre otros. Arrancando con una situación intrigante —la oposición de la gente de un pueblo de Guanajuato por la construcción de una mina— la historia avanza para enrolar a los personajes en conflictos de interés, el clasismo, las relaciones abusivas y la corrupción.

“Es un director [Amat] sumamente crudo que retrata la realidad que muchas veces nos da miedo ver, pero creo que ese cine también es necesario y que debemos ver aquellas cosas que nos dan pavor; porque si no las vemos, no las podemos enfrentar…” Nos dice Bárbara Mori en la reciente entrevista que tuvimos para nuestra historia de portada. Con un hilo conductor llevado por las desapariciones forzadas, en Perdidos en la noche se desarrollan arcos argumentales que llevan a encontrarnos con un México sumamente real, donde las confusiones entre los personajes y las situaciones de especulación crean un remolino de acontecimientos y cuestionamientos que nos ansían a conocer el desenlace. Tal como nos comparte Juan Daniel García Treviño, “Investigar acerca de estas problemáticas y condiciones sociales, echándome clavados a historias alrededor de la tragedia, platicando con personas que tienen experiencias reales de secuestros, de desaparecidos que ya no aparecieron, y de familias que siguen buscando justicia, […] seguir apoyando a otras personas en situaciones similares. …de alguna forma se convirtió en mi propia búsqueda.”, el retrato del pueblo mexicano es un acuerdo de profundo compromiso por parte de los actores.

El trabajo actoral de Bárbara Mori y Juan Daniel García Treviño —personajes en portada de nuestra edición MIEDO— muestran las características inherentes de cada uno —la calma y la perseverancia— mezcladas con las particularidades de sus respectivos personajes en la película, revelando una intensidad derivada de la desesperación, el insaciable poder, la locura y el hambre por la justicia. Dejando ver las cualidades de ambos como individuos, llevando a estrechar una relación por un evento en común. “Empecé a crear a Emiliano con dolor y con ganas de darle voz a un sentimiento, más allá de una búsqueda. Fue muy pesado y doloroso.”- Juan Daniel 

Podría decirse que existe una labor camaleónica y de introspección en la aparición de ambos en la película, al final siempre hay algo que conecte aspectos de la realidad de los actores con sus personajes ficticios. Bárbara Mori nos habla sobre esto, “Su cine [el de Amat] me da una absoluta claridad de lo que somos, de lo que es el ser humano”.

En el margen visual, a través del ojo de Adrián Durazo, la fotografía no decepciona, pues es un recurso fundamental para el build up de suspenso que genera la historia, apoyándose en los opuestos del día, con luces quemantes amarillas, y la noche, con la cruda oscuridad de las carreteras sin iluminación, haciendo un intermedio con los atardeceres que pintan el cielo con tonos suaves dando matices de serenidad que se contraponen con el sufrimiento de los personajes. La post-producción logra un juego de transiciones limpias que generan una experiencia inmersiva en la historia.

La película es un ejercicio audiovisual sobre los terrores que cazan a las familias mexicanas usando como antagonistas a la ingenuidad, la falta de empatía y el abuso de poder.

Perdidos en la noche ya está disponible en cines.